El Diario de Shigure Parte 1: [Los Inicios]
Página 1 de 1.
El Diario de Shigure Parte 1: [Los Inicios]
El Diario de Shigure Parte 1: Los Inicios.
“A todos aquellos que tengan sueños y luchen por ellos hasta el final, he de dedicar éste libro, el cual no se cuan extenso sea, pero me gustaría dejarles un mensaje de esperanza, que con esfuerzo y convicción se puede llegar muy lejos…” Atentamente Shigure Kuchiki.
Capítulo 1: La vida antes de la Muerte…
Ost del Momento.
Era una hermosa mañana de Sol, cuando en una ciudad de Japón una joven caminaba tranquilamente por las calles, era una niña adinerada, estaba bastante bien posicionada económicamente, sus padres eran empresarios de una de las mejores compañía pesqueras en aquel momento. Vestía delicada con colores llamativos y bastante agradables a la vista, pues estaba bien combinado, en sus cabellos siempre llevaba adornos y el cabello recogido.
Tras un tiempo se enamoró de un comandante militar, le amaba mucho, pero una tarde inesperadamente la joven se entera que éste había muerto en combate, su mirada se tornó sombría, ella esperaba una hija de aquel militar, la mujer en desesperación y tristeza no pensó más que en su dolor, quitándose la vida y en consecuencia la vida de la infante.
El Alma de la niña vagó por la tierra durante mucho tiempo, lloraba constantemente, estaba arraigada al mundo, porque tenía una vida por seguir que, amargamente le fue arrebatada, en eso el llanto es oído por un Hollow, el cual se dirige hacia ésta, el alma brillaba por la pureza que tenía, al ser un no nato, su fuerza y pureza es mayor, por lo que el Hollow estaba completamente dispuesto a devorarle, pero en ese instante preciso una espada de empuñadura blanca rebana la máscara de aquel Hollow quien es destruido enseguida, mas la beba yacía en brazos de un Shinigami.
Sus cabellos eran negros, llevaba adornos muy particulares en estos, sobre su cuello había un pañuelo de color aguamarina, el cual ondeaba con el viento al igual que su Hakama negra – Tsk… Miserable, es solo un infante – Solo dijo tajante y frío. Es entonces que bajó su espada la cual sostenía en su diestra, para ver a la beba en sus brazos – Al parecer… - Observa el Cadáver – Alguien no pensó en ti… mas tu arraigo a éste mundo no se puede cumplir – La beba lloraba intensamente hasta que oyó la voz del Shinigami, es entonces que sus ojos azules se posó en aquel ser – Te llevaré conmigo - musita al tiempo que sella la frente de la niña.
Sale entonces fuera de la casa y observa a un pelirrojo luchando – ¡Ya nos vamos Renji! – Exclama de una manera muy tajante típica de él. En eso el pelirrojo se acerca y ríe tras terminar de matar a dos Hollow – Tsk… Eh, Byakuya, no me dirás que ahora eres niñero… - Musita mientras desciende y queda de pié delante de éste con su típica sonrisa.
El otro shinigami por su parte niega – No es eso, es una no nata, tiene un reiatsu bastante interesante si la educo en mi clan… Posiblemente sea un buen shinigami – Musita mientras le observa – Pero eso deberá encontrarlo ella – Musita mientras crea una puerta dengai para volver a la Sociedad de Almas – Anda, muévete vago… - Dice al tiempo que se va perdiendo por entre la puerta con su teniente, para de éste modo volver a su hogar.
Tras un tiempo se enamoró de un comandante militar, le amaba mucho, pero una tarde inesperadamente la joven se entera que éste había muerto en combate, su mirada se tornó sombría, ella esperaba una hija de aquel militar, la mujer en desesperación y tristeza no pensó más que en su dolor, quitándose la vida y en consecuencia la vida de la infante.
El Alma de la niña vagó por la tierra durante mucho tiempo, lloraba constantemente, estaba arraigada al mundo, porque tenía una vida por seguir que, amargamente le fue arrebatada, en eso el llanto es oído por un Hollow, el cual se dirige hacia ésta, el alma brillaba por la pureza que tenía, al ser un no nato, su fuerza y pureza es mayor, por lo que el Hollow estaba completamente dispuesto a devorarle, pero en ese instante preciso una espada de empuñadura blanca rebana la máscara de aquel Hollow quien es destruido enseguida, mas la beba yacía en brazos de un Shinigami.
Sus cabellos eran negros, llevaba adornos muy particulares en estos, sobre su cuello había un pañuelo de color aguamarina, el cual ondeaba con el viento al igual que su Hakama negra – Tsk… Miserable, es solo un infante – Solo dijo tajante y frío. Es entonces que bajó su espada la cual sostenía en su diestra, para ver a la beba en sus brazos – Al parecer… - Observa el Cadáver – Alguien no pensó en ti… mas tu arraigo a éste mundo no se puede cumplir – La beba lloraba intensamente hasta que oyó la voz del Shinigami, es entonces que sus ojos azules se posó en aquel ser – Te llevaré conmigo - musita al tiempo que sella la frente de la niña.
Sale entonces fuera de la casa y observa a un pelirrojo luchando – ¡Ya nos vamos Renji! – Exclama de una manera muy tajante típica de él. En eso el pelirrojo se acerca y ríe tras terminar de matar a dos Hollow – Tsk… Eh, Byakuya, no me dirás que ahora eres niñero… - Musita mientras desciende y queda de pié delante de éste con su típica sonrisa.
El otro shinigami por su parte niega – No es eso, es una no nata, tiene un reiatsu bastante interesante si la educo en mi clan… Posiblemente sea un buen shinigami – Musita mientras le observa – Pero eso deberá encontrarlo ella – Musita mientras crea una puerta dengai para volver a la Sociedad de Almas – Anda, muévete vago… - Dice al tiempo que se va perdiendo por entre la puerta con su teniente, para de éste modo volver a su hogar.
Última edición por Shigure_Kuchiki el Sáb Mayo 07, 2011 1:46 am, editado 1 vez
Shigure_Kuchiki- Mensajes : 352
Fecha de inscripción : 09/08/2010
Edad : 39
Localización : Soul Society - Gotei 6
Re: El Diario de Shigure Parte 1: [Los Inicios]
Capítulo 2: El Renacer del Cerezo…
Ost del Momento
Es entonces que ambos shinigamis vuelven a la Sociedad de Almas, donde hicieron su respectivo labor, mas al presentarse ante el Sotaicho, mostraron a la pequeña beba, quien estaba en brazos de Byakuya, el shinigami pidió si le concedía el permiso de quedársela, por lo que al ser un asunto de índole noble, no se opusieron a ello. Es entonces que el joven de morenos cabellos se llevó a la niña a la casa Kuchiki. Una vez allí fueron recibidos el Líder del clan y la niña.
Atendieron a la pequeña y aquel shinigami se encargó de darle nombre, era otoño y llovía bastante por lo que observándole dijo – Cuiden de Shigure Kuchiki, de ahora en mas es mi nieta – Los sirvientes del clan se encargaron de la pequeña a quien cuidaron y asearon, le alimentaron y criaron. Desde pequeña siempre estuvo custodiada por el shinigami, alguna que otras veces había otros antiguos Shinigamis, tras un largo período Byakuya ya un tanto mayor y cansado de combatir, relega el puesto del 6º Escuadrón a los descendientes del clan, y otros no lo eran, pero si eficientes en su trabajo.
Siempre estaba impecable, vestida en tonos celestes, rosados, amarillos muy claros y blancos, sus cabellos desde muy pequeña estaban recogidos, con hermosos adornos en ellos, sus mejillas siempre eran rosadas, de bien niña simplemente jugaba, y daba un poco de alegría a aquel shinigami que por momentos parecía recobrar su sonrisa, sin embargo no dejaba de ser severo en su crianza.
Le enseñaban a tomar y a hacer el té, a vestir bien y comportarse. Incluso en presencia de otros compañeros de su abuelo, siempre se mostraba totalmente educada y refinada. Mas una vez entró y encontró a un shinigami un tanto mas grande que su abuelo, iba de la mano de Rukia, su tía abuela, quien le cuidaba y ayudaba a crecer junto a su hermano – Konichiwa… Sofu Sama – Musitaba la pequeña quien se acercaba, mas aquel ser de cabellos albos le asustó un poco. Pero este al verle se acercó.
Ella se encontraba detrás de su tía, y le miraba un tanto tímida pero muy curiosa, aquel ser se agachó a su altura – Hola pequeña… Soy Joshirou Ukitake, pero puedes decirme Shirou – Musita mientras de su Hakama saca una paleta de cereza. La niña se acerca de a poco y sonríe – Oji sama Shirou… - Musita entre risitas. Luego come la paleta mientras mira a todos muy tranquila. No era de hacer muchas travesuras pero sí que las había.
Rukia le había perdido de vista y le buscaba – Shigure chan… ¿dónde estás? – Llama la mujer mientras se acerca a un mueble para abrir su puerta y nada. Sigue caminando y abre una tapa en el suelo para fijarse si otra vez se había escondido debajo del tatami, y nada. – Demonios, ¿Dónde se habrá metido? – Musita mientras se pone de pie – Shigure… Ya sal, es hora de tu baño pequeña… - musita un tanto cansada de buscar, es entonces que sale al jardín de la casa, donde ve unos arbustos moverse, dándose cuenta de que la pequeña seguramente ahí se encontraba – Te encontré… - Musita mientras sale de detrás del arbusto, ella se asusta mucho, mas luego empieza a reír porque le había gustado el jugar así.
Su tía le toma en brazos y le lleva a ducharse, a comer y luego a dormir. Era tarde ya para tan revoltosa pequeña. Así pasaron los primeros años de la niña, hasta que cumple unos diez años de edad. Poco a poco se fue dando cuenta que no era normal, que dentro de su ser había potencial para algo mas, que tomar té, pero estaba tranquila en casa de su abuelo, sin embargo, poco a poco la curiosidad por saber le abrirían caminos en los cuales encontrará su destino marcado…
Atendieron a la pequeña y aquel shinigami se encargó de darle nombre, era otoño y llovía bastante por lo que observándole dijo – Cuiden de Shigure Kuchiki, de ahora en mas es mi nieta – Los sirvientes del clan se encargaron de la pequeña a quien cuidaron y asearon, le alimentaron y criaron. Desde pequeña siempre estuvo custodiada por el shinigami, alguna que otras veces había otros antiguos Shinigamis, tras un largo período Byakuya ya un tanto mayor y cansado de combatir, relega el puesto del 6º Escuadrón a los descendientes del clan, y otros no lo eran, pero si eficientes en su trabajo.
Siempre estaba impecable, vestida en tonos celestes, rosados, amarillos muy claros y blancos, sus cabellos desde muy pequeña estaban recogidos, con hermosos adornos en ellos, sus mejillas siempre eran rosadas, de bien niña simplemente jugaba, y daba un poco de alegría a aquel shinigami que por momentos parecía recobrar su sonrisa, sin embargo no dejaba de ser severo en su crianza.
Le enseñaban a tomar y a hacer el té, a vestir bien y comportarse. Incluso en presencia de otros compañeros de su abuelo, siempre se mostraba totalmente educada y refinada. Mas una vez entró y encontró a un shinigami un tanto mas grande que su abuelo, iba de la mano de Rukia, su tía abuela, quien le cuidaba y ayudaba a crecer junto a su hermano – Konichiwa… Sofu Sama – Musitaba la pequeña quien se acercaba, mas aquel ser de cabellos albos le asustó un poco. Pero este al verle se acercó.
Ella se encontraba detrás de su tía, y le miraba un tanto tímida pero muy curiosa, aquel ser se agachó a su altura – Hola pequeña… Soy Joshirou Ukitake, pero puedes decirme Shirou – Musita mientras de su Hakama saca una paleta de cereza. La niña se acerca de a poco y sonríe – Oji sama Shirou… - Musita entre risitas. Luego come la paleta mientras mira a todos muy tranquila. No era de hacer muchas travesuras pero sí que las había.
Rukia le había perdido de vista y le buscaba – Shigure chan… ¿dónde estás? – Llama la mujer mientras se acerca a un mueble para abrir su puerta y nada. Sigue caminando y abre una tapa en el suelo para fijarse si otra vez se había escondido debajo del tatami, y nada. – Demonios, ¿Dónde se habrá metido? – Musita mientras se pone de pie – Shigure… Ya sal, es hora de tu baño pequeña… - musita un tanto cansada de buscar, es entonces que sale al jardín de la casa, donde ve unos arbustos moverse, dándose cuenta de que la pequeña seguramente ahí se encontraba – Te encontré… - Musita mientras sale de detrás del arbusto, ella se asusta mucho, mas luego empieza a reír porque le había gustado el jugar así.
Su tía le toma en brazos y le lleva a ducharse, a comer y luego a dormir. Era tarde ya para tan revoltosa pequeña. Así pasaron los primeros años de la niña, hasta que cumple unos diez años de edad. Poco a poco se fue dando cuenta que no era normal, que dentro de su ser había potencial para algo mas, que tomar té, pero estaba tranquila en casa de su abuelo, sin embargo, poco a poco la curiosidad por saber le abrirían caminos en los cuales encontrará su destino marcado…
Shigure_Kuchiki- Mensajes : 352
Fecha de inscripción : 09/08/2010
Edad : 39
Localización : Soul Society - Gotei 6
Temas similares
» El Diario de Shigure Parte 3: Los 30 Años de Shigure
» El Diario de Shigure Parte 2: La Sociedad de Almas
» Ficha de Shigure Kuchiki
» Kuchiki Shigure - Presentándose
» El Diario de Shigure Parte 2: La Sociedad de Almas
» Ficha de Shigure Kuchiki
» Kuchiki Shigure - Presentándose
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.